RAICES

   Me tomo un tiempo para escribir esta visión que tuve hace unos cinco años.  No la entendía al principio, pero ahora creo que entiendo un poco mas. Tarde en las visiones de noche vi lo siguiente

   En la visión vi que estaba nublado.  Miré por la ventana hacia un campo llano y a lo lejos vi un árbol que estaba a solas.  El árbol era gigantesco y estaba florecido.  Estaba nublado y era el único árbol en la llanura.

   De momento vi en la distancia una tormenta huracanada que avanzaba hacia el árbol, con vientos fuertes llevándose todo de frente.  La tormenta por muchas horas abatía el árbol con todas sus fuerzas, arrancándole todas sus hojas y doblándole como hace con las palmas.  Pensé, seguramente la fuerza del viento iba a arrancar el árbol con sus raises fuera de la tierra.

   El árbol lucho pa sobrevivir las fuerzas del viento, asta que finalmente los vientos disminuyeron.  Mis ojos podían ver como el árbol se iba enderezando hasta quedarse derechito hacia arriba.  Aunque el árbol sobrevivió la fuerte tormenta, fue dejado pelado sin hojas o belleza, como un árbol pelado en el invierno.  Aunque el árbol fue dejado pelado y sin belleza, había esperanza para él.  Ya pronto el florecerá y volverá a ser el árbol que era ante de la tormenta.

   Por algunos años medite acerca de esta visión, y me di de cuenta que hablaba de mi propia vida.  No mucho después que tuve la visión, muchas cosas empezaron a ocurrir en mi vida.  Cosas que no podía controlar y batallas espirituales.  Mi vida empezó a caer, al igual mi vida espiritual,  y muchas de mis bendiciones se iban volando, en los dones del Espíritu ya no funcionaba.  Me sentía como ahogándome en aguas profundas. 

   Aun continue luchando porque sabia que Jesús estaba conmigo.  Finalmente, aquellas nubes negras que estaban sobre mi se fueron y vino mi día claro, gracias Jesús!!!

Querido participante, esta visión es una de las mías:

   Esta visión es verdadera y los eventos consiguientes por igual, quizás usted esta pasando por una tormenta en su vida.  Usted puede estar pasando por un problema en su vida que no tiene cierre, que es como una tormenta mortal para destruirlo.  No te des por vencido, Jesús esta contigo.  El estará contigo hasta que las nubes negras pasen.  Confía en su palabra y promesas, ellas son como fuerte raíces en tu corazón.  Las tormentas no te arrancaran de tu lugar, porque estas cementado y arraigado en su palabra, Dios te bendiga.

……….. mas la raíz de los justos no sera movida (Pro 12:3)’.

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En el Señor 

Hno. Nelson Cintron 

4/23/23